un poco cansado(libre)

Llevaba horas intentando mover el jodido armario. Y es que era un jodido armario. Se había levantado muy pronto esa mañana para ir a una tienda de muebles a cierta distancia de dónde vivía. Compró varias cosas que creía que necesitaría..una cama de verdad, una mesita baja, alguna lámpara de su gusto, unas tablas para la pared y poder poner ahí sus libros, un escritorio para su portátil y sus cd’s de música…y muchas cosas más, entre ellas, un armario de 4x4. Quería uno muy grande para que le cupiera toda la ropa y estuviera todo arreglado y sin necesidad de formar arrugas innecesarias…pero era muy grande y los hombres que se lo trajeron lo dejaron en mitad del cuarto.
Y por mucho que lo había movido, no había conseguido llevarlo hasta dónde él quería. Pero ya estaba sudando, deshidratado y fastidiado. Además, pensaba que no estaban ninguno de sus compañeros en casa para poder ayudarle, así que decidió ir a fumarse un cigarro a la calle antes de ducharse. Quería notar la brisa…pues hacía un día muy bueno.
Fue a la cocina a cogerse una cerveza y llegó al porche de la casa, sentándose contra la pared y cerrando los ojos, para descansar.

A penas y hacía un par de minutos que mi pequeña siesta había terminado. Simplemente el orden no era algo que se relacionara mucho conmigo, por lo cual no era de extrañar que gran parte de mi ropa se encontrara esparcida alrededor de toda la habitación.

No pude más que levantarme al sentir cómo mi cuerpo comenzaba a reaccionar luego de estar bastante tiempo tendido, necesitaba algo de movimiento por lo cual tal vez saldría a dar una vuelta. Mi vista se paseó distraidamente por los alrededores del pasillo. Todo se encontraba en absoluto silencio, lo cual hacía que me preguntara si realmente no me encontraría solo en casa.

Aquellos pensamientos fueron rápidamente verificados al notar a Die contra la pared y de ojos cerrados. Lucía algo cansado, tal vez él si había salido durante el tiempo en que me mantuve dormido y ahora la actividad le había pasado la cuenta a su cuerpo. Bostecé sonoramente antes de estirarme de manera perezosa - Si tienes sueño es mejor que vayas a la cama, ¿no? -murmuré extendiendo mis brazos hacia el techo, en verdad me sentía algo atrofiado.

Me estaba empezando a quedar transpuesto cuando escuché la voz de Kaoru a lo lejos.
Abrí los ojos y miré hacia arriba. Así que él estaba en casa. ¿No había escuchado todo el jaleo que había montado cambiando los muebles de un lado a otro?
-No tengo sueño-refunfuñó-es sólo que llevo un buen rato intentando mover el jodido armario de mi habitación y pesa una tonelada. Es imposible-su voz tenía un deje de enfado. Odiaba cuando no le salían las cosas bien.-Así que me he agobiado y he venido aquí a relajarme para no pegar cuatro gritos a un armario que no tiene vida.
Bebió un sorbo de su cerveza, pero enseguida la dejó, se había calentado de la exposición al sol.
-¿Y tú? ¿qué hacías?¿Estabas escuchando música con los cascos?Porque para no escucharme...-sí, estaba claro. Apenas se enfadaba el guitarrista pelirrojo, pero ese era un día de esos.

Reí de manera discimulada mientras Die continuaba explicandome su pequeño percanse con aquel armario, en realidad no había escuchado nada...tan cansado me encontraba que ni siquiera los ruidos de la habitación contigua habían conseguido perturbar mi sueño? -Sólo me quedé dormido...- contesté con simpleza antes de encogerme ligeramente de hombros al notar el semblante un tanto molesto del guitarrista frente a mi. No era mi culpa que no hubiera podido remover aquel mueble, sin embargo tampoco podía culparlo a él de estar de mal humor. No por nada conocía a cada uno de los integrantes de mi banda y sabía que no conseguiria mucho tampoco con comenzar una discusión.

Caminé un par de pasos hacia él hasta detenerme justo frente a su silueta- Te ayudo a mover aquel dichoso armario -dije cruzando ambos brazos tras mi cabeza, de cierto modo en espera de alguna especie de asentimiento o desaprobación de su parte a mi propuesta.

Die bufó. La verdad es que no le apetecía nada volver a pelearse con el armario, pero estaba claro que si no le ayudaba nadie tarde o temprano tendría que volverselas a ver con su archienemigo de nuevo.
Se levantó de mala gana y se puso frente a Kaoru. En verdad, no tenía porqué aguantar su estado de ánimo, así que intentó sonreír y puso una mano en su hombro
-Hey, me parece bien, en verdad. Sino, al final cogeré un palo y lo haré añicos...-terminó por reírse. No le gustaba estar de mal humor.-vamos?-dijo, volviendo a entrar en la casa y dirigiéndose a su habitación.

Le observé con los ojos entrecerrados, tal vez un tanto desconfiado de aquel repentino cambio de humor pues tenía más que claro que Die era de aquel tipo de persona impulsiva y que, dicho de otra manera, siempre terminaba enfadándose cuando algo no le resultaba del todo. Caminé guiado por él hasta su habitación, sólo limitándome a responder con un ligero asentimiento de mi parte hacia su persona antes de adentrarme tambien en aquel cuarto, encontrándome de lleno con aquel imponente armario -Cuanta ropa tienes Die... -murmuré completamente sorprendido del tamaño de... esa cosa, que obviamente me superaba en estatura.

Me paseé durante un par de segundos por su habitación hasta terminar por posar una de mis manos sobre la cara delantera de aquel mueble- bien... en dónde quieres que lo ubiquemos?

Bueno, estaba clarísimo que no iba a poder ni con su compañero siquiera. Seguía siendo un mastodonte el armario ese.
-Sí...mucha ropa. Pero lo importante es que no la quiero arrugada ni desperdigada. Tiene que estar todo bien puesto, por eso compré esta porquería gigante...ah, pues...lo quiero ahí, en esa esquina, al lado del escritorio.
Se acercó al lado de Kaoru para apoyar sus manos también. No lo iban a mover. No lo iban a mover. Era lo único que pensaba. Ah, demonios, ya le volvía el mal humor y ni lo había intentado.
-Ok, Kao, a la de tres. Una...dos...y tres...-y empujó con todas sus fuerzas que, en realidad, eran muy pocas, porque ya se había extralimitado antes intentándolo él sólo.

Asentí y al oir la señal de Die para mover aquel mueble empujé con fuerza contra la suave madera, bien... tal vez había exagerado un poco en mis especulaciones pues el tamaño del armario no compensaba completamente a su peso. De hecho... no estaba tan pesado como lo había creido al observarlo. Luego de un par de intentos conseguimos llevarlo hacia el lugar en que mi compañero de cuerdas lo habia asignado, sólo tardando un par de segundos luego en acomodarlo completamente junto al escritorio. Había dos opciones... o Die, a causa de su mal humor, no había conseguido mover en lo absoluto aquel mueble, o dos... en realidad estaba demasiado cansado como para poder hacerlo.

- Bien Die...- le sonreí cordialmente antes de dedicarle una fugaz mirada y mantener una de mis manos sobre la puerta del armario- al parecer no era tan pesado como decías -reí un poco.

Vale. Su mal humor iba en aumento. Kaoru ya sabía de su forma de ser y, encima, ahí estaba, tan tranquilo, burlándose de él. Se cruzó de brazos y se sentó en la cama, de un golpe
- Claro que pesaba, Kao.Lo que pasa es que entre dos siempre es más fácil-pero sabía que él apenas había puesto fuerzas esta vez, porque ya estaba realmente cansado...-y tú venías de una reparadora siesta...es normal que no te haya parecido difícil. Yo antes estuve arreglándolo todo-dijo gruñendo. Se tiró en la cama del todo y frunció el ceño. Se había cabreado.

- Ok, Ok, lo siento...- no pude evitar que una vez más aquella suave risita escapara desde mis labios antes de dejar caer completamente mi espalda contra la puerta del armario, cruzándome de brazos mientras una mueca un tanto divertida se tornaba en mi rostro al notar el semblante bastante fastidiado de Die. No era precisamente que gustara de molestar a los demás, sin embargo aquella actitud por parte de mi compañero no podía hacer más que causarme bastante gracia.

-Al menos ya lo movimos, ¿no?-intenté que mi tono esta vez no sonara demasiado burlón, pues tampoco era conveniente proseguir con mis jugarretas.

Se levantó de la cama furioso. A ver si dejaba de meterse con él. Se acercó lentamente al otro guitarrista y terminó estirando su brazo hasta apoyar la mano en el armario, cerca de la cabeza de Kaoru. Se acercó a su oído, susurrándole
-En verdad, Kao-chan, podría haberlo conseguido yo sólito, sin tu ayuda. Pero ya que lo hiciste, gracias-estaba picado por no haberlo podido hacer él con sus propias manos, pero ya no podía hacer otra cosa. Notó cómo el cuerpo le temblaba un poco. Para molestar a su compañero un ratito se echó encima de él, dándole un abrazo forzado, y volviendo a susurrar
- En verdad estoy muy cansado...

Alcé ligeramente una de mis cejas, manteniendome aún contra el armario, sin embargo esta vez con el peso de mi guitarrista amigo sobre mi torso. -Si estás cansado deberías de dormir un rato...- murmuré de brazos cruzados aún, sintiendo cómo la voz de Die parecía de alguna manera cada vez menos audible. ¿Tal vez se estaría durmiendo mientras pronunciaba aquellas palabras?

Incliné ligeramente mi rostro hacia uno de mis costados al notar el completo peso de su cuerpo contra el mio, retirando uno de mis brazos bajo él para sujetar de su hombro con una de mis manos.

Se aferró más todavía al cuerpo de su amigo, agarrándole por la cintura y apoyando su cabeza en el hombro de él.
-Es que estoy aquí muy agustito, Kao-chan-apenas si podía hablar, realmente quería dormir un rato, sería lo mejor para él...pero un ratito más sobre el cuerpo caliente del guitarrista no estaba nada mal. Siempre le había gustado el contacto con la gente y, posiblemente, era una de las cosas con las que más rápidamente mejoraba su humor, si es que tenía un día malo.

Dejé que un suave suspiro escapara de mis labios en respuesta, tal vez uno un tanto pesado antes de decidirme a sostener de su cuerpo con ambos brazos, impidiendo de ésta manera que cayera al piso- No tienes remedio, ¿verdad, Die? -murmuré sintiendo cómo esta vez era sólo mi voz lo que conseguía perturbar la atmósfera completamente silenciosa de aquella habitación. Al parecer Die había terminado por quedarse dormido, o al menos eso era lo que ante mis ojos podía apreciarse.

Luego de un par de segundos en que sentí su cuerpo completamente inmóvil contra mi torso, le sujeté bajo sus propios brazos, seguro y ya estaba en el séptimo cielo, pues no hacia ruido alguno. Le arrastré de manera lenta y silenciosa hacia su propia cama en donde lo acomodé suavemente sobre el colchón para luego sólo dejarme caer en uno de los bordes del mismo, observando a penas de reojo su rostro bastante relajado lo cual consiguió arrancarme una suave risita. Vaya que me hacía gracia el comportamiento de Die, sobretodo cuando estaba "molesto" por no poder realizar alguna acción por si mismo.

Notaba cómo su compañero le fue llevando hasta la cama. Tampoco le gustaba eso, él lo podía hacer muy bien solo...pero parecía que apenas tenía fuerza para contradecirle. Ya en la cama notó el peso del guitarra sobre ésta y escuchó una suave risita. Estaría muy contento de ver que le había necesitado. Cómo le jodía eso...pero no podía hacer nada, ¿verdad?Estaba muy cansado.
Agarró la muñeca de Kaoru y lentamente abrió los ojos
-¿De qué te ríes?, ¿de mí?Ten cuidado porque cuando tenga fuerzas de nuevo iré a por ti.-sonrió levemente y volvió a cerrar los ojos.-Antes de irte, dame un beso para poder dormir mejor. -¿A qué venía eso?¿Le habría escuchado?No estaba seguro, apenas le había salido la voz. Quería rendirse al sueño ya.

-Por qué tanto escándalo? -dijo Shinya un tanto molesto por todo el ruido que había estado escuchando mientras estaba en la cocina disfrutando de una rebanada deliciosa del pastel de fresas que había preparado. Había pensado que solo se trataba de Die porque los sonidos provenían de su habitación y tenía todas las intenciones de reclamarle el que no lo haya dejado comer en paz cuando vio del otro lado a Kaoru y se quedó callado esperando la explicación, viendo a Die, pero de vez en cuando de reojo a Kaoru

Soltó rápidamente la muñeca de Kaoru y se sentó completamente en la cama. ¿Y por qué hacía eso? Si sólo estaba dormitando...no hacía nada malo.
- Perdona, Shin, yo estaba moviendo mi armario y éste-dijo señalando a Kaoru- me dijo que quería ayudarme. Le dije que no hacía falta, pero sabes lo pesado que se pone...-sonrió. No tenía que ver mucho con cómo era la historia en realidad, pero así le gustaba más. -¿Te molestamos?, ¿qué hacías?

A penas y alcancé a oir un simple murmullo de labios de Die luego de que sujetara mi muñeca, siendo aquellas palabras opacadas aún más por la repentina llegada de Shinya a la habitación. Pude notar cómo ésta vez mi compañero de cuerdas liberaba mi extremidad de su agarre para luego sólo desviar la mriada hacia el recién llegado, de pie junto al marco de la puerta mientras en su expresión no podía decifrar nada más que un semblante interrogante e inquisidor.

Entrecerré mis ojos al oir simple y "veridica" respuesta por parte de Die con respecto a la situación de hacía un par de minutos, levantándome seguidamente del borde de la cama para luego caminar hacia nuestro batero. En el cual dejé caer uno de mis brazos por sobre sus hombros y una suave sonrisa adornó a mis labios- Deberías de haber llegado antes Shinya... asi nos ayudabas a mover el dichoso armario de Die para que luego no se estuviera quejando al recibir de mi contribución...- observé de ojos entrecerrados al aludido, recriminandole con la mirada su falta de cortesia y mal agradecimiento.

Sus ojos se clavaron en la mano de Die que sostenía la muñeca de Kaoru, a penas se había percatado cuando Die enseguida la soltó y escuchó atento la versión de los hechos que le daba Die sentado en la cama, y por eso le tenía agarrada la muñeca? Se preguntó así mismo pero prefirió no hablar del tema, era muy entrometido de su parte.

-Estaba comiendo pastel -dijo creyendo que así se libraría de soltar aquella pregunta, pero se le olvidó por completo que debía ser cuidadoso con la palabra pastel... Pero entonces sintió el brazo de Kaoru y su mente se quedó en blanco solo atreviendose a mirar de reojo al líder quien se mantenía bastante cerca incrementando un nerviosismo que supo disimular con un semblante serio, para luego ver a Die un tanto molesto -Si Kaoru te ayuda, porque no le agradeces? No lo han podido mover o ese será su lugar -dijo viendo el mueble

Seguro que se había dado cuenta de que estaba agarrando al otro guitarrista. Y conocía, o creía conocer algo, la mente del batera. Ya estaría haciendo suposiciones absurdas.
Se levantó de la cama, con cara de malhumorado, y se cruzó de brazos, ahora tenía que aguantar la mirada oscura de Kaoru y la mirada...la mirada de Shinya
- Claro que lo agradezco!Es sólo que...podría haberlo hecho sólo...-miró hacia el armario y volvió a posar la vista en Kaoru o, más bien, en los zapatos de Kaoru-y...gracias.
Se acercó al armario y le dio una fuerte palmada
- Se va a quedar aquí, ¿no te parece bien, damita?A mí me parece muy cool-volvía a tener su casi siempre eterna sonrisa, ahora volvía a aparecer que estaba de buen humor-ah, oye...dijiste algo de un pastel?-preguntó a su compañero, acercándose a ellos.

-No tienes por qué agradecer...- contesté con simpleza antes de encogerme de hombros, manteniendo aún mi brazo por sobre los de Shinya al no recibir ninguna especie de rechazo de su parte antes de observar de reojo a Die. Vaya que le gustaba ser obstinado "podría haberlo hecho solo" fue lo que aún circulaba por mimente hasta el instante en que mi compañero de cuerdas hubo dado aquella fuerte palmada a la puerta del armario.

Luego de un par de segundos en que se mantuvo frente a nosotros desvié la vista hacia el batero envuelto en mi brazo, casi como inquiriendo en el con la mirada en busca de alguna respuesta de su parte, antes de que la palabra "pastel" fuera pronunciada por sus labios. Preferí mantenerme en silencio, pues sabía del extremo gusto por los dulces de Shinya y no pretendia quitarle aquel exquisito postre.

-ah? -miró sorprendido a Die al darse cuenta de que había pronunciado la palabra postre con anterioridad y Die lo había escuchado a la perfección -ah! Postre... dije postre? -preguntó nervioso mientras desviaba la mirada pensando en qué decirle para deshacerse de él aunque era muy probable que no iba a engañarlo con facilidad, pero su pastel!! Miró de reojo a Kaoru y se encontró con su mirada lo que lo hizo ponerse más nervioso, Kaoru también quería? Bajó la mirada.

¿Qué pasaba que Kaoru no había dicho nada?Él siempre tan educado. Pues él sí quería pastel...al menos, si lo había hecho Shinya.
Le cogió de las manos y lo atrajo hacia él, quitándolo de los brazos del otro guitarrista. Se agachó un poquito, para mirarle de frente
- ¿Pastel?, ¿hiciste pastel?Ay, déjame probar un poquito...sólo un poquito...-le dio un beso en la mejilla y se irguió, sin darse cuenta que aún tenía las manos en él-..sí?

Alcé una ceja al apreciar cómo Die prácticamente arrebataba a nuestro batero del cobijo de mi brazo, sólo dejando que éste se mantuviera luego paralelo a mi cuerpo ante la repentina acción de su parte. Me crucé de brazos entrecerrando los ojos al presentir que ésta vez sería completamente ignorado para luego sólo devolver mi vista hacia Shinya, al cual le sostenian ambas manos mientras mi compañero de cuerdas intentaba de alguna manera de convencerle en que le otorgara algo de aquel, más que seguro, delicioso postre.

-No seas mal educado Die... el pastel es de Shinya y él lo preparó, seguramente, asi es que no seas parásito y déjale comer en paz

Sintió como su cuerpo delgado era sacudido por Die y lo separaba del abrazo de Kaoru. A penas había reaccionado cuando recibió el beso en la mejilla cerrando en segundos sus ojos para luego verlo serio brincando frente a él y manteniendo sus manos agarradas. Iba a decir algo, estaba a punto de soltar una frase para que se calmara su compañero que no le soltaba pero escuchó la frase de Kaoru y su semblante molesto se suavizó ante aquellas palabras hasta soltarle una pequeña risa por lo de "parásito" agachando inmediatamente el rostro como siempre hacía cuando reía.